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Natural Crunch fusiona la economía circular y el “fast healthy food” en VitaSnacks

Entrevista realizada por nuestro CEO, Antonio Ramirez por FRESH PLAZA, la revista y portal líder en el sector hortofrutícola.

Las frutas y hortalizas son alimentos saludables indispensables en nuestra dieta, cuyo consumo, como comparten en la web del movimiento internacional “5 al día”, está asociado con un menor riesgo de mortalidad y de sufrir enfermedades crónicas y sus mayores factores de riesgo. Y para facilitar a los consumidores que puedan tomarlas en cualquier momento y lugar de una manera fácil y, además, sabrosa, existen opciones como la de Natural Crunch y sus snacks de frutas y hortalizas ecológicas deshidratadas.

“Nuestro proceso de elaboración de snacks trata simplemente de concentrar el sabor y reemplazar el agua por aire de forma que consigamos una textura crujiente, todo ello a una temperatura suave de forma que podamos mantener la mayor cantidad de las propiedades nutricionales, vitaminas y minerales del producto de partida, sin llevar nada añadido (ni sal ni azúcar ni edulcorantes ni ningún otro aditivo). Esto lo realizamos mediante un proceso de secado con aire suave a temperatura moderada, seguido de un proceso de expansión con vacío y un secado final con aire extraseco”, indica Antonio Ramírez Fajardo, CEO de la firma almeriense con sede en Benahadux.

“Para que el resultado sean productos excelentes tenemos que partir de excelentes materias primas. Así, nuestro lema es utilizar siempre productos vegetales ecológicos seleccionados de temporada en su punto óptimo de maduración. En este sentido, tratamos de que sean productos de cercanía, como lo son el tomate, el pimiento, el calabacín o la naranja de Almería, la fresa o el arándano de Huelva, el brócoli de Murcia, la calabaza de Granada, el boniato de Málaga o Cádiz o la remolacha de Córdoba. Pero también, en algunos casos, como sucede con las frutas tropicales, la fase inicial del procesado (manipulación del producto fresco y primer secado suave previo al expandido) se realiza junto a las zonas donde se cultivan”, lo que supone diferentes ventajas, explica Antonio.

“En primer lugar, la materia prima está en su punto óptimo de maduración, pero además reducimos la huella de carbono por transportar productos deshidratados en lugar de productos frescos (menos peso y menos necesidades de refrigeración), y desarrollamos economías locales gracias a la generación de valor añadido sobre sus excedentes de producción de frutas”.

“Esto lo hacemos siempre mediante procesos de homologación de proveedores en los que se audita no solo su documentación e instalaciones, sino también sus propios procesos productivos de forma que nos aseguremos que puedan aplicar las condiciones de proceso que nosotros les indicamos para que la calidad sea exactamente la que necesitamos y su producto pueda ser conforme a nuestras especificaciones”.

De “comida para astronautas” a formar parte un programa estatal de I+D+i
La provincia de Almería es un epicentro en la producción de frutas y hortalizas frescas en Europa y también un gran foco en innovación agroalimentaria, cuyas empresas participan activamente en la investigación y los nuevos desarrollos del sector; entre ellas Natural Crunch, que actualmente forma parte del proyecto “Desarrollo de soluciones de fast healthy food mediante una gama de aperitivos saludables” en el marco del Programa Estatal de I+D+i Orientada a los Retos de la Sociedad-Retos Colaboración, con fondos del Ministerio de Economía y Competitividad y el Fondo Europeo de Desarrollo Regional.

“Tras abandonar la Universidad de Almería para montar una consultora de innovación alimentaria, entre los diversos proyectos que abordamos, investigando sobre cómo extraer antioxidantes naturales desde la fruta y verdura, desarrollamos el proceso con el que elaboramos nuestros snacks, y ya hace 10 años decidimos crear nuestra propia fábrica para ofrecer algo que contribuya y facilite el consumo de frutas y verduras para una alimentación más sana y equilibrada”.

“Otra de nuestras razones de ser fue la de poder aprovechar las frutas y hortalizas de gran calidad que, por razones estéticas o por sobreproducción en su temporada, no tienen salida comercial”, remarca Antonio. “Esta es la política que aplicamos a la totalidad de nuestros sabores con los que vamos rotando producción a lo largo de todo el año según sus temporalidades y calendarios productivos”.

“El mercado de estos productos todavía no está maduro y cambia mucho de un país a otro, de unos canales a otros y de unos clientes a otros. Por ejemplo, en las cadenas de España, los favoritos en fruta son la manzana, el mango y el arándano, y, en verduras, el boniato, la zanahoria y la remolacha”.

“Pero, año tras año, vemos cómo los consumidores van familiarizándose con nuestros productos y aguzando su paladar. Cuando empezamos, nos felicitaban por ‘haber inventado una fabulosa comida para astronautas’ y, ahora tenemos más de 6.000 fans incondicionales”.

Únicos en el mercado
“Esta es una categoría de producto nueva, pero ya empiezan a aparecer diferentes actores con diferentes alternativas: desde Tailandia, con fritos al vacío, horneados de Portugal, escarchados o liofilizados de América o incluso de China. Pero nuestras verduras y frutas son las únicas crujientes sin freír ni congelar ni hornear, y sin que lleven nada añadido, por lo que sí que podemos decir orgullosos que somos genuinos en la categoría, en la que tenemos las verduras y frutas crujientes más saludables del mercado”, subraya el CEO de Natural Crunch.

“Hemos trabajado con todos los canales, desde ingredientes para industria, caterings, hasta venta directa al consumidor. Actualmente en nuestro país, se pueden encontrar en la zona bío de Carrefour, Alcampo o El Corte inglés; en los lineales de Hiperdino, Maskom, y BM supermercados; en tiendas premium como Sánchez Romero, o en cadenas ecológicas especializadas como Veritas, Herbolario Navarro, etc.; y, desde cualquier localización, a través de nuestra tienda online, donde tenemos disponibles todas las referencias y formatos. Creemos que, con un consumidor cada vez más exigente y variado, la omnicanalidad es la mejor solución”.

Los snacks ecológicos de Natural Crunch están listos para comer. “Es abrir el paquete y disfrutarlos”, dice Antonio Ramírez, “aunque también se pueden usar enriqueciendo tus platos en la cocina como toppings, como guarnición o acompañamiento, y para dippear con hummus y guacamoles”.

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